Un blog de mitos, leyendas, costumbres y tradiciones de México

Archivo para la Categoría "Leyendas y mitos de Querétaro"

Leyendas queretanas: Cuevas y tesoros

CUEVAS Y UN TESORO

(Leyenda de El Zamorano, municipio de Colón, Querétaro)

Aquí también se le conoce como «Pinal de Zamorano» –dice don Macedonio Pérez Hndz., gambusino de oficio. Existen varias cuevas; en una de ellas sacaban ópalo. Yo sé porque yo llevaba a unas personas de México y sacábamos puras rojuelitas de ópalo ya liquidado; ellos se llevaban hasta tres cargas de costales de ixtle. Eran tres amigos Ignacio, Raúl y Javier.

De aquel lado hay otra cueva que le llaman «Rincón de la Peña Blanca» y de este lado hay otra cuevota grande donde hay una mata de órgano y por eso le dicen la «Cueva del Órgano». Hay también un lugar muy misterioso que le decimos la «Peña de la Colmena». Había siete colmenas ahí –todavía están–. Había un señor de Colón que se llamaba Apolinar y cada año las venía a capar esas colmenas. Se llevaba harta miel y la cera la regalaba en la parroquia de la Virgen de Soriano, a la Santísima Virgen de los Dolores para que no le pasara nada, porque la Santísima Virgen le ayudaba y lo protegía y le daba más miel de aquellas colmenas. Se descolgaba el señor de arriba de la ceja de la peña con unos cables y su señora se quedaba abajo con un bote recibiendo la miel. Ahí en esa peña también hay una cueva muy grandota, pero no tiene dibujos de los que usted anda preguntando. (Relato en un blog de Homero Adame.)

Pero allá en el cerro El Mexicano hay una cueva que le dicen «El Meco» porque hay unos nopales grandes de esos mecos. Ahí una vez espantaron a estos tres amigos de México. Yo los había acompañado para traer ópalo, pero cuando nos dio la noche yo me tuve que ir a buscar unos animales y ellos se quedaron en esa cueva. Luego me contaron en la mañana que estaban por dormirse cuando de repente oyeron unos ruidos así como cuando pega el bastón en el piso y oyeron una voz que les decía que sacaran el tesoro. Entonces se asustaron mucho y como les dio miedo, mejor se fueron. Yo me los encontré en la mañana en un reliz, estaban enteleridos con harto frío, tenían frío porque la noche había sido fría y también por el miedo que todavía traían. Nos sacaron nada porque la voz les dijo: “Todo o nada”, y como era una voz muy fea así como del más allá, mejor se fueron y no sacaron nada de esa cueva del Meco. (Leyenda publicada por Homero Adame.)

Notas:

1. La foto de cuevas fue tomada del sitio Guía turística México. Que el enlace sirva de crédito y agradecimiento a su autor.

2. La foto del cerro El Mexicano fue tomada de la página de Internet Tripmondo. Que el enlace sirva como crédito y agradecimiento a sus creadores.

El templo de San Felipe Neri, la catedral queretana

¿SABES DÓNDE QUEDA LA CATEDRAL DE QUERÉTARO?

Texto de Homero Adame

Las catedrales son, por antonomasia, el centro religioso más importante de toda ciudad que cuenta con un obispado. Ellas son un punto de referencia fundamental para los habitantes, sin importar cuál religión profesen. Son así porque, salvo raras excepciones, se localizan en el corazón de cada ciudad, frente a la plaza de armas, cerca del palacio municipal o de gobierno Y todo en conjunto conforman la armonía original de un pueblo. A falta de uno de estos tres elementos, dicha armonía está fuera de balance.

Hablar de catedrales es evocar, inmediatamente, la Catedral Metropolitana, la de Puebla, la de Morelia, la de Mérida, de Guadalajara, de San Luis Potosí o la de la ciudad donde uno vive. Pero ¿alguna vez hemos preguntado dónde queda la catedral cuando andamos de visita por Querétaro? De ser así, ¿cuál ha sido la respuesta de los lugareños? Sin duda tres de cada cinco lo piensan dos veces porque no saben con exactitud dónde se encuentra ni cuál es.

Aunque suene a redundancia, vale decir que Querétaro es una hermosa ciudad que lo tiene todo. Es por ello que nos sorprende no encontrar su catedral en el primer cuadro. Al preguntar por ahí, mucha gente indicará que es la iglesia de San Francisco, pero no es así. La catedral se encuentra a cinco cuadras al poniente de la plaza principal, en la esquina de las calles Madero y Ocampo. Verla por primera vez es pensar: “esta no puede ser la catedral”, porque carece de la magnificencia que caracteriza a este tipo de construcciones religiosas.

El templo de San Felipe Neri, hoy en día la Catedral de Querétaro, en sus orígenes fue el oratorio del convento de los felipenses. Se empezó a construir en 1786 y se concluyó en 1805, pero no fue sino hasta 1921 cuando recibió la categoría de catedral. Previo a esto, en el mismo año de 1805, el cura Miguel Hidalgo y Costilla la bendijo como templo al oficiar la primera misa.

Su corta historia como catedral se vio interrumpida durante la guerra Cristera, cuando fue saqueada y utilizada como cuartel y hasta salón de baile. Hoy en día no es más que una de las muchas iglesias de la ciudad de Querétaro, aunque con rango de catedral, pero rebasada en arquitectura, belleza y centro del culto por muchas otras.

Su interior es frío y demasiado austero, sin gran ornamento ni obras pictóricas de arte sacro. En cambio, su exterior es interesante. Desde el punto de vista arquitectónico es considerada como un excelente ejemplo de la transición del barroco al neoclásico, por conjugar elementos de ambos estilos en su fachada. En ella sobresalen sus seis columnas corintias voladas en la parte inferior, y otras tantas menos ornamentadas, y de estilo acoplado, en la superior.

Aunque la catedral queretana tiene una torre inconclusa –y del reloj no hay mucho que mencionar–, se le considera como una joya única por haber sido construida con piedra de tezontle. Conocerla vale la pena, pues así entendemos que la catedral no es necesariamente el templo más bello e importante de una ciudad.

Notas:

  1. Este texto se publicó originalmente en la revista México desconocido, en 2001.
  2. Las imágenes fueron tomadas de Internet. Que los enlaces sirvan de agradecimiento y crédito a sus autores: Catedral de Querétaro e Interior de la catedral de San Felipe Neri

Los ahorcados de la casa maldita – Leyenda de Juitepec, Morelos

Casa maldita en Morelos 1 - leyenda de Homero Adame

Para saber algo sobre Juitipec, Morelos

Jiutepec (del náhuatl Xiuhtepec o Xiuhtepetl: “En el cerro de las piedras preciosas”) estaba habitada por familias nahuas cuando llegaron los españoles. Terminada la conquista, estas tierras fueron dadas como merced a Hernán Cortés, quien las anexó a su marquesado del Valle de Oaxaca. Siglos más tarde se fundaron varias haciendas en esta región. En 1852, el pueblo de Jiutepec perdió parte de su territorio que fue integrado a la hacienda de Atlacomulco. Debido al descontento, los habitantes lucharon ferozmente contra los hacendados durante la Revolución Mexicana. Con la Reforma Agraria se reconfiguraron muchos municipios del estado, y el 10 de mayo de 1930 se fundó el municipio de Jiutepec, teniendo a esta población como su cabecera.

Si te interesa este libro y quieres saber más de su contenido, sigue este enlace: Leyendas de todo México, aparecidos y fantasmas, de Homero Adame.

El mayorazgo de Jaral de Berrio – 2da parte

HACIENDAS DEL MAYORAZGO DE JARAL DE BERRIO

HACIA FINALES EL SIGLO XVIII – 2da PARTE

 

Ésta es la segunda parte de las haciendas que hacia finales del siglo XVIII pertenecían al mayorazgo de Jaral de Berrio.

Como ya dije en la primera parte (sigue este enlace: haciendas de Jaral de Berrio – 1ª entrega) se trata de un proyecto enfocado principalmente en la historia oral de las muchas haciendas que comprendieron este mayorazgo, tal vez el más importante que hubo en la Nueva España.

Veamos a continuación el resto de las haciendas de esa época. Si alguien tiene información sobre alguna de ellas y desea compartirla por este medio, a través de los comentarios, será de mucha ayuda para enriquecer la investigación. Me comunicaré directamente con todos los informantes.

Hacienda de AJUCHITLÁN

Ubicación: Colón, Querétaro

Historias: poco se platica de la época de los marqueses de Jaral de Berrio como dueños de esta hacienda. Las historias tienden a mencionar a hacendados más recientes.

Estancia de EL CARRETÓN

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Historias: en la época de los condes, aquí organizaban charreadas y jaripeos.

Estancia de LA CIENEGUILLA

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Historias: Miguel de Berrio tuvo problemas con Ana de Lanzagorta, quien era la dueña de la hacienda La Quemada porque los linderos entre ambas haciendas no estaban bien definidos en La Cieneguilla. Se fueron a litigio que perdió el marqués de Jaral.

Estancia de LAS NEGRITAS

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Historias: como aquí no había casas, excepto trojes, los trabajadores se las ingeniaron para construir “cuevas” en las trojes mismas, que les servían como casa-habitación.

Hacienda de ESCOLÁSTICA

Ubicación: Pedro Escobedo, Querétaro

Historias: aquí hay dos haciendas, la antigua que perteneció al mayorazgo de Jaral de Berrio y está bastante destruida, y una más reciente propiedad de una familia de apellido Aspe. La iglesia es de la época antigua, aunque ha sufrido remodelaciones.

Hacienda de LA “D”

Ubicación: Pedro Escobedo, Querétaro

Historias: el conde tenía tantas haciendas que se le acabaron los nombres y entonces empezó a nombrarlas siguiendo el abecedario; ésta fue la letra D.

Hacienda de VICENTE DE FERRER

Ubicación: El Marqués, Querétaro

Historias: la mayoría está relacionada con la contigua hacienda de Chichimequillas. ¿Alguien sabe alguna que hable sobre los Berrio o los Moncada?

Hacienda de XUCHITLANCITO

Ubicación: Pedro Escobedo, Querétaro

Historias: el casco de esta hacienda parece muy reciente, aunque tiene elementos de la época de los marqueses del Jaral de Berrio.

Jaral de Berrio y su mayorazgo – Parte 1

EL MAYORAZGO DE JARAL DE BERRIO

Éste es un proyecto enfocado principalmente en la historia oral de las haciendas que comprendieron el mayorazgo de Jaral de Berrio. Se dice que “el conde” tuvo 99 haciendas, lo cual parece ser sólo una conseja popular. Del marquesado de Jaral de Berrio hubo alrededor de 30, mientras que las heredadas del condado de San Mateo hubo 36. A esa suma habrá que agregarle las que se adquirieron en el siglo XIX, pero no llegaron a 99, excepto si se cuentan los ranchos como Lequeitio, que en el siglo XX se convirtió en hacienda, con otros dueños.

Si alguien sabe anécdotas o leyendas relacionadas con el conde o con las haciendas de Jaral de Berrio y desea compartirlas a través de este medio para enriquecer el proyecto, extiendo mi agradecimiento anticipado y me comunicaré directamente con los informantes para añadirlos en los créditos del libro y hacerles llegar una copia cuando esté publicado.

Antecedentes del mayorazgo de Jaral de Berrio

Los antecedentes de Jaral de Berrio se remontan a 1601, cuando Juan de Zavala, oriundo de Luzúa, Vizcaya, en España, se estableció en esos rumbos y tuvo otras estancias y ranchos. A su fundo se le conocía como La Carbonera de Juan de Zavala. Años más tarde, Prudencio de Armenta adquirió esas tierras y les llamó Xaral, pero de algún modo volvieron a la familia anterior, ya que se sabe que Juan Ruiz de Zavala y Lois vendió sus haciendas, incluyendo Jaral, a Joseph de Retes en 1687. Este hombre fue uno de los más ricos de la Nueva España en el siglo XVII, teniendo propiedades en la capital y sus alrededores, pero más en el centro norte del país. Él heredó su latifundio a su sobrina Teresa Josefa de Zaldívar, hija de Dámaso de Zaldívar. Ella se casó en segundas nupcias con  Andrés de Berrio, nacido en Orduña, Vizcaya, en 1669. Con la fortuna de ella y los contactos políticos de él, inició el auge de San Diego del Jaral, pues se anexaron otras haciendas como Cerritos de Bernal, Huizache, Ovejas, Pozo Blanco, San Martín de Ovejas, San Vicente Ferrer y Sierra Hermosa. Andrés de Berrio murió en la ciudad de México en 1747).

Miguel de Berrio y Zaldívar y el marquesado

Su hijo Miguel de Berrio y Zaldívar (1716-1779) heredó aquellas haciendas y con el paso del tiempo anexó otras para extender su latifundio, como las de Cabras, Deseadilla, Gallinas y San Onofre. Él contrajo matrimonio con Anna María de la Campa y Cos (1734-1799), condesa de San Mateo de Valparaíso y de tal modo se incrementó el gran latifundio. En 1774 obtuvo el título de marqués del Jaral de Berrio.

Miguel de Berrio y Anna María de la Campa y Cos crearon un mayorazgo a favor de su nieto Adeodato de Moncada y Berrio (hijo de María Ana), para así proteger los caudales patrimoniales. Esto sucedió en 1779, año de la muerte de Miguel de Berrio.

María Ana de Berrio y de la Campa y Cos de Moncada

Esta mujer fue la 2da marquesa de Jaral de Berrio. Ella se casó con Pedro de Moncada, 1er marqués de Villafont, aunque se le conocía con el inexistente título de marqués de Moncada.

Dado que este italiano era un caza fortunas, vividor y manirroto, los marqueses de Jaral habían creado el mayorazgo en favor de su nieto Adeodato, hijo mayor de María Ana.

Con los fallecimientos de Miguel de Berrio, de Anna María de la Campa y Cos, así como del heredero inmediato de éstos, Adeodato de Moncada y Berrio en 1781, y de María Ana de Berrio y de la Campa y Cos de Moncada, en 1803, la fortuna y los títulos pasaron a Juan Nepomuceno de Moncada y Berrio, 3er y último marqués del Jaral de Berrio.

Juan Nepomuceno de Moncada y Berrio

Fue en esta época cuando el mayorazgo de Jaral de Berrio tuvo su máximo esplendor, pues este marqués, mejor conocido como “el conde”, incrementó su latifundio por compra-venta para así convertirse en el máximo terrateniente del siglo XIX. Entre otras, se añadieron las haciendas de Agostadero, El Carro, La Ventilla, Sierra Hermosa y Trancoso.

El marquesado terminó en 1829, cuando se abolieron los títulos nobiliarios en México; sin embargo, los terratenientes continuaron. Juan Nepomuceno de Moncada y Berrio, nacido en 1781, dejó una numerosa descendencia. A su muerte, en 1850, repartió la herencia entre sus herederos y las haciendas que habían sido parte del marquesado del Jaral de Berrio siguieron existiendo. Incluso, hacia finales del siglo XIX Manuela Moncada adquirió la extensa hacienda de Cedros, en el municipio de Mazapil, Zac.

Fin del linaje y de Jaral de Berrio

El linaje de los Berrio, de la Campa y de Moncada se mantuvo como de grandes hacendados hasta ya entrada la Revolución. Las últimas tierras y haciendas se perdieron con la repartición ejidal. La última propietaria del extenso latifundio fue Margarita Raigosa y Moncada de Moncada, segunda esposa de Francisco Cayo de Moncada y Fernández de Córdoba, descendiente directo de Juan Nepomuceno de Moncada. Cuando vendió la hacienda de Jaral, en 1949, se terminó aquella historia de riqueza y abolengo.

Bibliografía:

Ibarra Grande, Pedro. Jaral de Berrio y su marquesado. León, Gto. 2002.

Reyna, María del Carmen. Opulencia y desgracia de los marqueses de Jaral de Berrio. Instituto Nacional de Antropología e Historia. México, D.F. 2002.

Haciendas del mayorazgo de Jaral de Berrio en el siglo XVIII

Jaral de Berrio

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Anécdotas: 1. el conde tuvo 99 haciendas, una para cada hijo. 2. El “castillo” o palacio de Jaral de Berrio lo remodeló Francisco Cayo de Moncada y Fernández de Córdoba, hacia finales del siglo XIX sobre construcciones anteriores de sus ancestros.

Leyendas: cuentan que el fantasma de una mujer, posiblemente hija del conde, se aparece en la casa.

Hacienda de Cabras

Ubicación: San Diego de la Unión, Guanajuato

Anécdotas:

Hacienda de Cerro Prieto

Ubicación: Mexquitic de Carmona, San Luis Potosí

Anécdotas: se dice que el corazón de Miguel Miramón, quien fue fusilado junto con Maximiliano y Tomás Mejía, estuvo en la capilla de esta hacienda.

Hacienda de El Huizache

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Anécdotas: cuentan que el conde organizaba jaripeos en los corrales.

Hacienda de Gallinas

Ubicación: Villa de Arriaga, San Luis Potosí

Anécdotas: se sabe que la segunda esposa del conde Juan Nepomuceno Moncada nació aquí. Se llamaba Teodora Hurtado de Mendoza y Tapia y se dice que tuvieron hijos antes de casarse.

Hacienda de Rincón

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Anécdotas: cuentan que Andrés de Berrio se subió al cerro más alto y dijo: “hasta donde veo es mío y allí pondré mis haciendas”.

Hacienda de San Andrés del Cubo

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Anécdotas:

Nota: aquí tengo una duda que ojalá alguien la pueda aclarar. Me han dicho que hay una hacienda llamada Rincón al sur de Dolores Hidalgo. ¿Saben dónde queda exactamente?

Hacienda de San Bartolo

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Anécdotas: dicen que en esta hacienda hubo un convento, pues la dueña, hija del conde, era religiosa y allí hacía retiros espirituales con otras monjas.

Hacienda de La Estancita

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Anécdotas: una vez al año venía toda la familia del conde a celebrar la fiesta del herradero.

Nota: en el testamento de Miguel de Berrio se menciona a La Estancita como hacienda, pero no pude ver restos del casco y/o casa grande, excepto de corrales. Es posible que haya sido sólo un rancho.

Hacienda de San Martín

Ubicación: Pinos, Zacatecas

Anécdotas: se dice que el conde le regaló esta hacienda a una de sus amantes.

Hacienda de San Onofre

Ubicación: Pinos, Zacatecas

Anécdotas: cuentan que cuando abandonaron la hacienda, la imagen del Cristo que estaba en la capilla se perdió, pero luego apareció en la vecina hacienda de Gallinas.

Hacienda de Santa Rosa

Ubicación: San Felipe, Guanajuato

Anécdotas: cuentan que cuando Francisco Javier Mina asaltó la hacienda de Jaral de Berrio, pasó por aquí con las carretas cargadas de oro y que una de ellas se perdió.

Hacienda de Sierra Hermosa (ahora Sierra Vieja)

Ubicación: Villa de Cos, Zacatecas

Anécdotas: se sabe que esta hacienda se llamaba Sierra Hermosa en la época de Miguel de Berrio, pero cuando el conde Juan Nepomuceno Moncada adquirió una hacienda contigua, a la nueva le llamó Sierra Hermosa y a la original le cambió el nombre por Sierra Vieja.

– – – – – –

No he podido ubicar algunas haciendas de esta época. Ojalá alguien tenga información y la comparta a través de los comentarios.

  • Hacienda de Barrancas
  • Hacienda de Deseadilla

– – – – – –

Sigue cualquiera de los enlaces de abajo para leer textos o leyendas relacionadas con las haciendas de Jaral de Berrio:

Mitos y leyendas de Querétaro: La aparición de la virgen de Schoenstatt

LA APARICIÓN DE LA VIRGEN DE SCHOENSTATT

(Leyenda de Los Olvera, municipio de Corregidora, Querétaro)

Acá cuentan mucho la leyenda de cuando se apareció la virgen –explica doña Guadalupe Hernández viuda de Olvera–. Lo de la aparición parece que fue hace ya muchos años. Foto de Homero AdameEn aquel tiempo, Los Olvera era un ranchito chiquito y mi papá trabajaba como labrador. Andaban una tarde él y otros compañeros arando acá en Los Copales –ya no existe ese lugar; eran tierras de labranza pero ahora son parte de El Pueblito–. Entonces mi papá nos platicaba que era una tarde muy nublada y que de repente tronó muy fuerte, que se vino un rayo y que entre las nubes se abrió como un rayo de luz que exactamente entraba acá hacia Los Olvera. Mucha gente se vino con la curiosidad de ver qué era y mire que así mero fue como se encontraron que se había aparecido una imagen de la virgen en un mezquite. O sea que se dieron cuenta de que el rayo partió el tronco del mezquite y ahí estaba adentro la virgen, enterita, sin ningún rasguño ni quemaduras ni nada. Imagínese el gusto de la gente por el milagro que les tocó ver. Desde entonces esa virgen ha sido muy milagrosa ella y por eso luego le hicieron su santuario a donde viene harta gente a venerarla. Leyenda encontrada en un blog de Homero Adame.

.

Algo sobre Los Olvera y su santuario

El Foto de Homero Adamesantuario de la virgen de Schoenstatt se encuentra en Los Olvera, municipio de Corregidora, Querétaro. A este municipio también se le conoce popularmente como El Pueblito, aunque en realidad ése es el nombre de la cabecera municipal, que se localiza a 7 km de capital del estado. El nombre es en honor a Josefa Ortiz de Domínguez, heroína queretana de la guerra de Independencia de 1810.

Corregidora se ubica al suroeste del estado de Querétaro. Al norte colinda con el municipio de Querétaro; al este, con el municipio de Huimilpan; al sur y al oeste, con el estado de Guanajuato.

Nube de etiquetas